El conductor del tractor siniestrado el pasado viernes durante la romería que cada año celebra la localidad de Bujaraloz con motivo de la festividad de San Jorge dio positivo en el test de alcoholemia, según informaron fuentes de la Guardia Civil. En el accidente, que se produjo al volcar el remolque del que tiraba el tractor y en el que viajaba una veintena de jóvenes, murió un chico de 18 años y otros 18 resultaron heridos.

Tras el trágico suceso, el vecino que transportaba a los afectados, entre los que se encontraba un hijo suyo, fue detenido por agentes de la Guardia Civil tras realizarle las pruebas de alcoholemia. Aunque ha trascendido el positivo del hombre, de 50 años, no se ha revelado por el momento su tasa concreta de alcohol en sangre.

Posteriormente fue puesto en libertad con cargos al entenderse que no había riesgo alguno de que el arrestado se diera a la fuga y "porque el pueblo asume lo ocurrido".

Aunque el análisis del accidente no se ha llevado a cabo todavía, se baraja la hipótesis de que el tractor realizara un complicado adelantamiento a otro vehículo de iguales características --cargado también con vecinos que regresaban de la comida popular celebrada en una ermita situada a siete kilómetros del municipio-- antes de enfilar la recta en la que volcó el remolque. Ahora bien no se ha constatado todavía la relación directa entre este hecho y el posterior accidente.

"Un remolque no vuelca en una zona así si no realiza un viraje brusco", agregaron las fuentes consultadas. Algunos de los vecinos corroboraron esta versión a este diario.

Además, también pudo influir un exceso de velocidad del vehículo en el trágico accidente.

A pesar de que en las romerías de muchos pueblos es una tradición muy arraigada que los vecinos se trasladen en remolques, esta práctica es "ilegal", afirmaron desde la Benemérita: "En algunos municipios existe ese hábito porque es una costumbre que viene desde hace años. El problema es que la normativa actual no permite los desplazamientos de ese tipo, aunque sea duro aceptarlo cuando se viven situaciones como las del pasado viernes".

Por otra parte, de los seis jóvenes que fueron ingresados en la noche del pasado viernes, tan sólo cuatro continuaban ayer hospitalizados. Todos ellos sufren diversas heridas que no revisten gravedad.

En el hospital Clínico de Zaragoza permanecen en observación H. R. V. y S. G. V., ambos de 17 años; en el Miguel Servet se encuentra M. V. F., que padece un traumatismo craneoencefálico; y en el hospital Arnau Vilanova de Lérida sigue ingresado con una fractura de fémur el joven V. P. S. P.