Que cualquier universitario con un ordenador portátil pueda conectarse sin necesidad de un enchufe. Ese es el objetivo del rectorado de la Universidad de Zaragoza, que durante los dos próximos años va a cubrir todos sus campus con las antenas necesarias para poner en marcha este proyecto de wireless fidelity (WIFI). Va a empezar inmediatamente y lo va a hacer por el colegio mayor Santa Isabel y la biblioteca María Moliner, en el campus de la plaza San Francisco, pero pronto se extenderá al Centro Politécnico Superior, a Veterinaria y a otras zonas, incluidos los campus de Huesca y de Teruel.

El adjunto al rector para Tecnologías de la Información y Comunicaciones, Francisco Serón, destacó ayer la importancia de esta iniciativa: "De esta forma, los estudiantes pueden trabajar en cualquier sala, incluso sentados sobre la hierba o en un banco. Se nota que el uso del ordenador portátil es cada vez más frecuente y así es mucho más cómodo y práctico".

Por supuesto, se establecerán mecanismos para que sólo los universitarios puedan aprovecharse de este sistema WIFI. "Al acceder será imprescindible poseer una identificación universitaria. Sin esta credencial no se podrá trabajar en el ordenador", puntualizó Serón.