No hay incumplimiento en las obligaciones de la gestión y la explotación del Teatro de las Esquinas. Así lo asegura el informe jurídico elaborado por el área de Cultura y que se pronuncia sobre el acuerdo privado al que llegaron las tres empresas que formaron la unión temporal (UTE) con la que ganaron el concurso para hacerse con este recinto.

En este pacto Pam Hosteleros, junto a Teatro Che y Moche y Teatro del Temple, firmaba la cesión anticipada de sus derechos y obligaciones así como una transmisión aplazada de su 33% que se materializaría en el 2015.

Pero pese a rubricarse solo cinco meses después de la adjudicación y sin que se haya cumplido la quinta parte de la concesión, como exige la ley, el informe defiende que prima el principio de solidaridad que rige las UTEs, por el que todos los socios son corresponsables de lo que ocurra. Y a la actividad no le ha afectado un acuerdo que, curiosamente, dicen desconocer aún.