El Ayuntamiento de Zaragoza se ha puesto la pilas y ha duplicado el número de árboles plantados en el último año. Mientras que en el 2017 la cifra de reposiciones fue de 1.050, el año pasado ascendió a las 2.081. La previsión para este curso asciende hasta a las 2.508 unidades.

El arbolado de la ciudad -que supera los 128.000 ejemplares- no se encuentra en perfectas condiciones, como se pudo comprobar el pasado verano cuando se desplomó un gran número durante las tormentas. En la tromba de agua de julio, que apenas duró diez minutos, se vieron afectados 533 ejemplares.

Según los datos facilitados por el área de Medio Ambiente, durante el pasado año se «hizo un esfuerzo» para aumentar el número de unidades plantadas hasta alcanzar las 2.081, más de 700 en alcorques y el resto en otras localizaciones como rotondas o zonas verdes. A pesar de haber elevado la cifra, desde el consistorio admiten que es insuficiente teniendo en cuenta «el número de alcorques vacíos y la tasas de pérdida anual de arbolado» por las tormentas y por el estado de salud de los mismos, pues muchos están enfermos, otros secos y otros tantos sufren las consecuencias de las obras.

El incremento en el número se debe a varias causas que desde Medio Ambiente resumen en tres.

Desde Parques y Jardines han valorado que la ciudad necesita que se replanten unas 1.800 unidades cada año. Dentro de esta valoración del servicio aparecerían las plantaciones compensatorias por cualquier tala llevada a cabo por solicitudes de terceros, principalmente por obras.

Hasta ahora, las empresas compensaban las talas y este impacto medioambiental con una indemnización económica al consistorio que no se traducía en replantaciones.

El año pasado, este tipo de sustituciones ascendió a 70 unidades y en lo que llevamos de año ya superan las 50. Los presupuestos participativos han tenido mucho que ver en este incremento. En el 2018 se plantaron 125 dentro de este programa y a petición de los vecinos y en el 2019 van a ser 114 solo en el casco Histórico y 500 en el distrito Universidad.

Desde el consistorio matizan que no se tienen que reponer todos los árboles que faltan en las calles -donde resulta más llamativo un alcorque-, pues muchas veces, cuando se proyecta una zona verde se plantan más unidades de las necesarias.