El Ayuntamiento de Zaragoza no escatima en gastos para tener bien alimentados a los 31 concejales durante las sesiones plenarias. Hasta 8.099,95 euros está dispuesto a gastarse el alcalde, Pedro Santisteve, en el servicio de catering en los próximos plenos, es decir, 1.619,99 euros por cada sesión mensual. Teniendo en cuenta que son 31 concejales, cada menú sale a 52,2 euros por edil.

El contrato menor incluye el servicio de catering de los cinco plenos que se celebrarán desde octubre a diciembre, incluyendo el Debate sobre el estado de la ciudad y el de presupuestos.

El servicio deberá incluir, según aparece en la oferta, bocadillos o sándwiches fríos y calientes, con un tamaño «de entre 10 y 15 centímetros» y «de entre 20 y 25 centímetros», para todos los gustos.

También tiene que proporcionar bocadillos para vegetarianos, además de tortilla de patata; platos de quesos y curados, «con pan debajo»; tapas de boquerones; croquetas, pero, eso sí, «artesanales»; canapés variados -también para vegetarianos-; boles de tomate para «untar» y una ración dulce, para endulzar las sesiones, habitualmente broncas y tensas.

No es el único gasto de las arcas municipales que generan los maratonianos plenos del ayuntamiento. La emisión en streaming supone un coste de 19.965 euros. Solo se retransmiten las sesiones plenarias, a pesar de que había intención de hacer lo mismo con las comisiones e, incluso, las ruedas de prensa, algo que finalmente no ha sucedido.

También se incluye la factura del servicio de interpretación de lenguaje de signos. En este caso, el precio varía. Por ejemplo, para los plenos de enero, febrero y marzo fue de 1.320 euros; para el de abril fue de 793,50; el de mayo ascendió a 207 y los dos de junio a 1.035 euros.