El futuro de la factoría Averly volvió al salón de plenos del Ayuntamiento de Zaragoza en pleno debate sobre la posible creación del Museo de la Industria de Aragón y la amenaza de la coordinadora Salvemos Averly de llevar a la Fiscalía la aprobación del plan especial de Brial para levantar en sus suelos 200 viviendas. Y lo hizo por partida doble, para ratificar el visto bueno inicial a este y para pedir "extrema prudencia" por parte del Gobierno municipal a la hora de posicionarse sobre las medidas que planteen sobre ella "mientras no lo hagan los tribunales", manifestó el responsable de Urbanismo, Carlos Pérez Anadón.

El socialista también recordó que "tras la recomendación de la fiscalía tampoco se ha dado luz verde a la demolición", ni se debe hacer, añadió. Por eso, pidió no ir más allá de lo que establece la catalogación de Patrimonio de la DGA ni de las resoluciones judiciales. Por eso apoyó desestimar, junto al PP, que se declare a la factoría Monumento de Interés Local. Un nivel de protección que excedería el impuesto por el Gobierno de Aragón, que es quien tiene la competencia y que "no se ha dado a ningún inmueble similar en la ciudad".

El PP respaldó la decisión del Gobierno municipal, frente al voto a favor de CHA e IU, recriminándoles a ambos que el Plan General de Ordenación Urbana (2001) del 2001 recoge "metro a metro" el planteamiento que Brial ha trasladado en su petición al consistorio y que durante trece años ninguno haya puesto objección a esto, cuando este permite construir pisos.

Apudepa, que había pedido esta protección municipal para la factoría, criticó que el ayuntamiento trate de "esconderse detrás de mama, detrás de la DGA" y pidió, sin éxito, ser "valientes".

Juan Martín, de CHA, también apuntó a la "prudencia" pero para pedir "dejar sobre la mesa este expediente", no desestimarlo. Tampoco se contempló esa opción. Mientras, Pablo Muñoz, de IU, manifestó que "lo que preocupa es que Averly acabe siendo una Schindler", un "caparazón vacío" sobre el que algo tendría que decir también quien lo ha catalogado, la DGA.