El Ayuntamiento de Monzón publicó ayer un bando en el que obliga al "escrupuloso cumplimiento" por parte de cualquier ciudadano de la Ordenanza de Convivencia Ciudadana y la de Protección del Medio Ambiente contra la Contaminación por Ruidos y Vibraciones, ya que, en época estival, los ruidos se perciben con mayor intensidad debido a que los vecinos del municipio duermen con las puertas y ventanas de las casas abiertas para hacer frente al calor.

Según el ayuntamiento, en la ordenanza están definidos los "comportamientos incívicos" y se delimita el horario nocturno --de once a ocho los días laborables y de doce a diez los sábados, domingos y festivos-- y se regula el régimen sancionador.

En el bando se especifica que cualquier ruido molesto, ya sea habitual como el tráfico de coches, o propio del verano, como las verbenas de barrio, las "charradas a la fresca" o las actuaciones musicales en bares y pubs, será medido en "el domicilio o local que fuere con las puertas y ventanas cerradas", algo de lo que deben ser conscientes todos aquellos ciudadanos que dejen estos accesos abiertos y procedan a elaborar una queja formal a la Policía Local.

No obstante, siempre que haya una causa justificada, la Policía Local tramitará cualquier queja y abrirá el expediente que corresponda, el cual acabará en sanción si el ruido supera los decibelios permitidos en la ordenanza.