El Ayuntamiento de Zaragoza ha reforzado la vigilancia policial en el antiguo cámping Casablanca de Valdefierro, en el que en la última semana se han producido tres incendios. Tras la inspección realizada el jueves por técnicos municipales de Urbanismo, se ha acordado también enviar a partir del lunes a las brigadas municipales para limpiar las instalaciones y sellar todos los accesos. Además, se ha dado orden a Bomberos para que presten especial atención a los terrenos.

En opinión de Urbanismo, los incendios de los últimos días se deben a actos de vandalismo que se intentarán controlar incrementando la vigilancia. Pese a que la orden ha sido cursada a Servicios Públicos, el presidente de la Asociación de Vecinos Aldebarán, Manuel Moreno, sostuvo ayer que ese aumento de presencia policial no se había notado. "Cada vez se les da más competencias a los agentes y todos sabemos que los recursos son escasos así que ya veremos si ese incremento de la vigilancia es eficaz", dijo Moreno.

El presidente del colectivo vecinal reiteró ayer el malestar de los ciudadanos por el cierre del cámping "cuando todavía queda más de un año hasta el inicio de las obras de reconversión de la zona". En opinión de Moreno, "se trataba de unas instalaciones muy utilizadas y ahora sólo constituyen un riesgo. Si continuase abierto nos hubiésemos ahorrado tanto los incendios como la confusión que ha habido este verano entre los turistas al venir y ver que estaba cerrado".

Los tres incendios de esta semana se suman a los registrados a finales de agosto y principios de septiembre. En apenas tres semanas, se han contabilizado cinco incidentes.