El Ayuntamiento de Zaragoza elaborará antes de que concluya este año un diagnóstico del estado del comercio local y de los efectos que ha tenido la crisis económica. El objetivo, tener una radiografía del sector que permita abordar un nuevo plan local del comercio que permita incentivar los establecimientos de proximidad. Los datos todavía no se conocen, pero el consistorio reconoce que San José o Las Fuentes podrían ser de los más afectados.

La teniente de alcalde de Régimen Interior y Participación, Lola Ranera, dio ayer estas pinceladas sobre la situación comercial en la presentación de una campaña realizada por el banco Sabadell para incentivar las compras. Se parte de la base de los 8.000 comercios que actualmente están censados en la ciudad, aunque las cifras podrían variar.

El estudio tendrá que estar finalizado antes de que concluya el año para poder elaborar una estrategia. Ranera recordó que los presupuestos disponen de una partida de 100.000 euros para llevar a cabo estos análisis de la situación. Sí se conocen ya datos que ha revelado el Instituto Nacional de Estadística (INE) y que cifran es descenso del consumo en una horquilla de entre un 20% y un 30%, dependiendo del producto.

Falta saber cómo ha repercutido este descenso en el pequeño comercio. "Los barrios de Las Fuentes y San José ya están empezando a estar preocupados por este tema", indicó. "A final de año tendremos un nuevo diagnóstico para tener un plan en el 2015 que trabajaremos con las asociaciones comerciales", aseguró la teniente de alcalde.

Para fomentar la actividad de las tiendas ayer se presentó la campaña Creemos en Zaragoza, que impulsa el Banco Sabadell y a la que se han adherido 1.630 comercios de toda la ciudad.

Ranera justificó el apoyo municipal porque el actual plan local de comercio, aprobado en el 2010 con una vigencia hasta finales de 2014, señala que "se apoyará cualquier iniciativa que fomente y dinamice el comercio de proximidad".