La céntrica calle Moret Zaragoza se cierra hoy al tráfico para no volver a ser nunca más la que fue. Comienzan hoy 16 meses de trabajo para construir en el subsuelo tres plantas y 230 plazas de párking subterráneo que eliminará las que hasta ayer existían en superficie. Porque cuando las vallas se retiren, en abril del 2017, este vial será completamente peatonal, con acceso al estacionamiento por el paseo de la Mina y una reordenación del tráfico que cambiará para siempre la movilidad en ese punto de acceso y salida desde la plaza de los Sitios, junto a la que también habrá una entrada al este nuevo aparcamiento.

Ayer ya estaban apostadas en la acera las señales que anunciaban la prohibición de estacionar en la calle. Los trabajos comienzan a primera hora de la mañana de hoy y en la acera y hasta en los vehículos (con papeles en el parabrisas) se alertaba de la obligación de retirar los vehículos. Las máquinas entran hoy en la zona, por fin, tras más de un año de tramitación para poder enajenar el subsuelo por 1,3 millones de euros a la empresa San Ignacio Renta. Será ella la que explote esas 230 plazas, de las que 30 se pondrán a la venta y las 200 restantes se ofrecerán en rotación. Quizá para los conductores que hasta ayer mismo lo podían dejar en esa misma calle.

Cambia Moret y cambia la movilidad en la zona. Los vehículos tendrán que buscar la salida hacia el paseo de la Mina por la calle José Canalejas, y acceder desde este hacia la plaza por Mefisto. Porque en estos días empezarán a aplicarse algunas de las restricciones que este proyecto conlleva, pero quedan flecos por anunciar. Por ejemplo la gran incógnita de si se habilitará un acceso, con giro a la izquierda, desde el paseo de la Mina --en dirección a San Miguel y a Miguel Servet--, una de las cuestiones sobre las que el consistorio no ha resuelto aún.

SEIS MILLONES DE EUROS

Mientras, la empresa adjudicataria pone en marcha por fin un proyecto valorado en unos seis millones de euros, de los que se desglosan los 1,3 que obtuvo para comprar el subsuelo, otro millón para la urbanización posterior de la calle y el resto, 3,7 para las obras propias de esta infraestructura.

Al mismo tiempo, tendrá tiempo para comercializar las 30 plazas que podrá sacar a la venta, a un precio que oscilará entre los 39.500 y los 52.000 euros. Saldrán al mercado de forma inminente en un entorno con potencial interés, tanto por residentes de inmuebles próximos como por los centros de trabajo que se ubican en sus inmediaciones.

Sin embargo, las plazas que se ofertarán para rotación son mayoría, el 85% del total. A precios que, por ahora, tampoco han publicitado y entre los que tampoco se conoce si incluirán descuentos o bonos para fidelizar clientes. Muchas incógnitas de cara a un aparcamiento que lleva décadas en un cajón y que ahora ya tiene fecha para su estreno. Si no hay imprevistos en la obra que hoy comienza.