La consulta de Inmunología Pediátrica del hospital zaragozano Miguel Servet, referencia en Aragón para inmunodeficiencias, volverá a quedar habilitada a partir del próximo 2 de abril después de que el servicio quedara suspendido desde el pasado 15 de marzo por la finalización del contrato de la pediatra especializada responsable de la unidad.

La Administración ha optado por volver a contratar a la especialista, Carmen Rodríguez-Vigil, que ocupaba una plaza de otra profesional en excedencia, cuyo regreso a su puesto -ajeno a esta consulta- supuso el final del contrato de Rodríguez-Vigil.

En todo caso, se trata de una solución eventual, tal y como había advertido el departamento, ante la imposibilidad de cubrir una plaza en un hospital a través de un contrato fijo si no se gana por oposición. Así, a la espera de la resolución de la Oferta Pública de Empleo (OPE), la pediatra -que, al parecer, habría participado en el proceso- volverá a ocupar ese puesto merced a un contrato transitorio por tres meses.

De este modo, la consulta permanecerá inactiva poco más de dos semanas aunque apenas diez días hábiles. Tras el puente de Semana Santa, regresará un servicio cuya suspensión había provocado numerosas quejas. Como las de la Asociación Española de Déficits Inmunitarios Primarios (AEDIP), que acogió la medida adoptada por el Salud con una moderada satisfacción. «Al menos, se ha reaccionado, aunque espero que dentro de tres meses no vuelva a suceder lo mismo. Se trata de un parche que supone un alivio de tres meses, pero no es una solución para tirar cohetes. Esperamos que no vuelva a pasar», expuso su presidente Carlos Jiménez.

Para el responsable de este colectivo, el contrato temporal de tres meses que firmará la especialista no es la solución más idónea. «No soy quien para decir qué tipo de contrato se debe firmar, pero creo que se podría haber recurrido a ocupar la plaza con interinidades hasta su cobertura definitiva. Estamos hablando de una consulta súper importante».

Esta unidad pediátrica -existe otra de adultos- detecta cinco diagnósticos nuevos al año. Su relevancia en edades pediátricas es notable. «Ha salvado vidas», recuerdan desde AEDIP. Porque estas enfermedades provocan casos muy graves en niños, que si no reciben tratamiento o trasplante, tienen numerosas opciones de fallecer antes de su primer año de vida. De ahí la importancia del diagnóstico precoz.

Existen cerca de 350 tipos diferenciados de inmunodeficiencias primarias con un amplio abanico de gravedad y sintomatología, con una prevalencia real desconocida. Tienen en común el alto número de infecciones que sufren los pacientes que las padecen y la complejidad de su manejo, por lo que requieren personal especializado.

Estas infecciones, además de ser numerosas en variedad y en cantidad, son más duraderas, más graves y se complican con mayor frecuencia que en la población general y responden peor al tratamiento.