La ola de frío que ha sacudido Aragón a lo largo de los últimos días sigue provocando una afluencia masiva al servicio de Urgencias del hospital Infantil de la capital aragonesa. Al igual que durante la mayor parte de la semana pasada, los casos de menores aquejados de problemas respiratorios, como neumonía o bronquitis, volvieron a superar, ayer, la media habitual.

"De nuevo ha habido que atender a un gran número de niños y ha vuelto a quedar patente la falta de espacio", indicaron fuentes sanitarias.

De igual modo, las consultas de los centros de Atención Primaria han registrado, a lo largo de las últimas horas, una gran incidencia de casos de niños aquejados de catarros y otros procesos víricos y respiratorios. Las bajas temperaturas de los últimos días habría sido un factor clave en la proliferación de estos problemas.

Por contra, la situación en las Urgencias del hospital Miguel Servet ha mejorado considerablemente respecto a las últimas semanas y, aunque la afluencia de pacientes ha vuelto a ser alta, no se han producido episodios de colapso.

El centro hospitalario mantiene abiertas todas las dependencias, incluidas las tres salas de observación y deriva pacientes a otros centros, como el hospital Militar.

En semanas anteriores, la falta de camas provocó largas esperas en pasillos y boxes de Urgencias, donde algunos pacientes habían tenido que aguardar incluso más de cien horas hasta ser ingresados.

Con todo, el personal sanitario sigue pidiendo a la consejería la ejecución de un plan específico destinado a los enfermos crónicos, que continúan siendo los que más acuden a este servicio al agravarse sus patologías a causa de factores como cambios en la climatología.