Coordinar todas las acciones de los departamentos del Gobierno de Aragón para optimizar los recursos y alcanzar la "excelencia" en la gestión son los objetivos que se ha marcado para luchar contra la despoblación el comisionado especial nombrado por el Ejecutivo aragonés, Javier Allué.

Esos son los principales objetivos que ha destacado Allúe en su primera comparecencia tras su nombramiento en la Comisión Institucional de las Cortes a petición del PP, cuyo portavoz en la materia, Miguel Ángel Lafuente, le ha pedido que concrete las funciones del cargo y qué acciones va a emprender en el año que queda de legislatura.

Lafuente ha reclamado a Allué que detalle las actuaciones del Gobierno de Aragón luchar contra la despoblación "más allá de los titulares de prensa" del consejero de Vertebración del Territorio y presidente de CHA, José Luis Soro, y del titular de Presidencia, Vicente Guillén, a quien ha criticado por tachar de "victimismo" la reciente protesta de los turolenses en Zaragoza.

El diputado popular ha subrayado que como comisionado tiene el encargo de coordinar a las distintas consejerías para luchar contra despoblación, y "ahí tiene usted tajo para hartarse", ha dicho, porque a su juicio el Gobierno no es un "ente unitario sumatorio de esfuerzos" y su nombramiento, ha sugerido, responde a un reparto político para contrarrestar desde el PSOE el observatorio contra la despoblación puesto en marcha desde la consejería liderada por CHA.

Ha hecho hincapié en que la situación es conocida por todos pero el problema es que "se gasta mucho dinero pero cada uno va por libre" y la base, ha apuntado, es mejorar la eficiencia y la eficacia y Aragón se juega mucho en el nuevo sistema de financiación autonómica y en Europa.

La lucha contra la despoblación, ha destacado Allué, es un asunto "de Estado", quizá el problema más grave que sufren Aragón y otras comunidades, y requiere de la colaboración del Parlamento y de todos los grupos políticos, por la trascendencia que tienen en este ámbito las iniciativas y leyes en tramitación, como la ley de igualdad o la de emprendimiento y trabajo autónomo, incluso de alianzas con otros parlamentos.

"Se trata de buscar soluciones desde el consenso" y no culpables, ha agregado Allué, quien ha incidido en que las responsabilidades entre administraciones están muy repartidas y que el propósito, desde el cargo que ocupa, es focalizar toda la política en cuatro vías de trabajo.

La primera, las propias acciones del Gobierno de Aragón, desde todos los departamentos, para optimizar recursos contando con todos los operadores, tanto públicos como privados, y en segunda instancia, las del Gobierno central, y en este aspecto ha destacado la necesidad de que el nuevo sistema de financiación autonómica tenga en cuenta el coste real de los servicios atendiendo a las características de Aragón.

Un asunto del que habló recientemente con la comisionada del Gobierno de Mariano Rajoy para el reto demográfico, Edelmira Barreira, ha explicado.

Las alianzas interregionales es otro de los espacios de trabajo en la lucha contra la despoblación, y en este aspecto ha lamentado que el Senado sea "inoperante", así como la Unión Europea ante la nueva programación de fondos 2021-2027.

Allúe ha reiterado que es necesario caminar hacia la excelencia, pero ha tachado de "injusto" que se acuse al Gobierno de Aragón de no hacer nada y de tener en el abandono a los municipios, dadas las actuaciones puestas en marcha en materia de sanidad, educación o servicios sociales, y también las relativas a empleo, teniendo en cuenta que es un problema estructural.

Asimismo, ha destacado que el observatorio contra la despoblación de Aragón, que se constituyó hace cuatro días adscrito a la consejería que dirige Soro, es perfectamente compatible con sus funciones.

En el turno de los grupos, Maru Díaz, de Podemos, ha estimado que las explicaciones sobre el nombramiento de Allué habría que pedírselas a Lambán o a Guillén y ha cuestionado que se haga a diez meses de las elecciones y no hace tres años, como si el Gobierno cayera ahora en la cuenta de que hace falta en medio de la "batalla" hacia las próximas elecciones.

Para María Herrero, del PAR, hay "lagunas" en cuanto a los objetivos del comisionado y sus estrategias para llevar a efecto sus metas, ha cuestionado la utilidad del observatorio, al afirmar que "igual muchas cosas ya están observadas", y ha destacado que la demografía ha formado parte de la agenda de los sucesivos gobiernos de Aragón y se han puesto en marcha muchas actuaciones fundamentales contra la despoblación, entre ellas las propias comarcas.

Ramiro Domínguez, de Ciudadanos, ha insistido en que Allué está ante el problema más grave de Aragón y ha opinado que la solución es "sencillísima" y pasa por infraestructuras, empleo y servicios que hay que llevar al territorio y que requieren dinero, y ha avanzando que en seis meses pedirá que comparezca de nuevo para que informe de sus avances.

Por el grupo mixto, Carmen Martínez, de CHA, ha insistido en que se trata de un problema endémico que espera que se pueda afrontar si hay acciones coordinadas entre todas las instituciones, y en ese aspecto es fundamental una financiación autonómica adecuada.

Darío Villagrasa, del PSOE, ha advertido de la magnitud del reto que representa la despoblación, que Aragón tiene mucho que decir y no puede esperar a que Madrid haga de guía, que en este debate es fundamental la financiación autonómica y que es precisa la transversalidad de todas las administraciones, incluida la UE.