El Gobierno de Aragón se va a dirigir a todos los ayuntamientos para recordarles cómo pueden acotar sus montes para regular la recogida de setas y hongos, poner freno a la sobreexplotación de los recursos micológicos y mantener su reproducción. Con la llegada del otoño, las sierras y pinares montañosos reciben una avalancha de aficionados que arramblan, sin control, con todo lo que ven. Estas medidas intentarán frenar una situación que se agrava con los años.

Desde la DGA se recuerda que "esta práctica ayuda a racionalizar el aprovechamiento de un recurso que puede ser un complemento para el medio rural, por lo que se considera muy interesante su puesta en valor sostenible". De hecho, en la comunidad ya son 103 los cotos de setas creados, de los que 73 están en Huesca, 19 en Teruel y 11, en Zaragoza. Los consistorios interesados pueden llamar a la DGA, al 976714812.

Los primeros cotos comenzaron a constituirse en los 90. Y uno de los más recientes ha sido, por ejemplo Litago, que el pasado mes de agosto decidió regular esta actividad. Obtener el carnet de coto da derecho a recoger como máximo diez kilos en terreno municipal o cuatro en el parque previo pago de tres euros por persona y día. El Seprona y los Agentes de Protección de la Naturaleza son los encargados de velar por este cumplimiento. Además, el ayuntamiento tenía previsto prohibir la recolecta un día a la semana para facilitar la recuperación del terreno cara al fin de semana.

La normativa vigente en Aragón en materia de aprovechamientos micológicos es el Decreto 166/1996 de 29 de agosto, que regula el método de recolección de setas en los montes propios de la DGA y en los declarados de utilidad pública. Este, también detalla las medidas sancionadoras y la posibilidad de establecer planes anuales de aprovechamientos de los montes. Aunque son los ayuntamientos los que, con sus ordenanzas, pueden desarrollar la actividad micológica. La estampa de furgonetas venidas desde otras comunidades para la compra masiva de robellones puede de esta manera tener sus días contados.