El factor de género, añadido al de la inmigración, provocó en el año 2016 un aumento de las denuncias femeninas en SOS racismo Aragón. La asesoría especializada en mujeres inmigrantes atendió en Zaragoza este año pasado 209 consultas frente a las 175 del año anterior: «Hay un repunte progresivo, desde el año 2014, tanto en consultas como en casos atendidos», puntualizó ayer José Luis Aliaga, presidente de SOS Racismo en Aragón.

Las acciones cotidianas como por ejemplo el rechazo a sentarse junto a una mujer en el autobús «por su indumentaria de tipo musulmán no suponen un delito pero hay que denunciarlas públicamente», añadió. Estos hechos discriminatorios se suman a los de índole laboral, sobre todo en mujeres que desarrollan labores domésticas: «Hemos detectado muchas irregularidades en las nóminas y cotizaciones, o despidos improcedentes. Incluso se dio el caso de una interna que estaba trabajando recién operada», afirmó Carlota Placed, responsable de la oficina de Información y Denuncias.

SOS Racismo Aragón presentó ayer su memoria del año 2016, destacando que su oficina de Información y Denuncias atendió 708 consultas entre la población inmigrante, y tramitó 157 nuevos casos. No obstante, la tendencia al alza que se observa en el género femenino no se da en general, pues las cifras son estables respecto a años anteriores.

El 75% de los inmigrantes atendidos son de procedencia africana o sudamericana y entre la tipología de las denuncias está el racismo institucional, la discriminación en la entrada de locales públicos e incluso agresiones. También se recibieron bastantes consultas sobre el nuevo procedimiento de acceso a la nacionalidad española y denuncias por «los interminables plazos» de los expedientes tramitados antes de octubre del 2015 al amparo de la legislación anterior de los cuales todavía siguen muchos pendientes de aprobación.

Educar y prevenir/ Por otra parte, en el área de Pedagogía y Sensibilización, se trabaja en colegios, institutos y otras instituciones socio-educativas en materias de educación intercultural y prevención del racismo y la discriminación. En el 2016 se llevó a cabo en cinco centros de Educación Infantil y Primaria, en los que 401 alumnos participaron en los talleres para prevenir comportamientos racistas y actitudes discriminatorias.

Además, en este área se desarrolló, en colaboración con el Ayuntamiento de Zaragoza, la Estrategia Antirrumores, un proyecto para desmontar ideas estereotipadas, prejuicios y rumores falsos que proliferan en torno a la inmigración.

«Se trata de promover un contradiscurso en contra de los bulos que genera el racismo», destacó Aliaga, como por ejemplo, cuando se escucha que «los inmigrantes vienen a quitarnos el trabajo». Para ello se realizaron actividades formativas y se creó una red de agentes, a los que se facilitaron técnicas y habilidades necesarias para «neutralizar el discurso falso sobre la inmigración y personas de otras culturas», concluyó Aliaga.

El año pasado se formaron 111 agentes antirrumores pertenecientes a distintas esferas de la sociedad, desde estudiantes hasta profesores o profesionales de entidades sociales, e incluso funcionariado, y se está elaborando un manual con argumentos positivos y datos contrastados que desmontan esas falsas apreciaciones.