Las empresas de desinfección no paran. Cada vez son más las compañías y comunidades de vecinos que solicitan sus servicios para garantizar que las zonas comunes están libres de coronavirus.

Una de las que no puede permitirse un día de descanso es Aerosol, dedicada al control de plagas y desinfección. Fue la empresa que se encargó de desinfectar la residencia La Abubilla, en Huesca, habilitada por la DGA de forma urgente y ante el incremento en el número de personas mayores contagiadas. En los primeros 15 días de confinamiento han acudido con sus equipos a unas 60 compañías y a alrededor de 150 comunidades de vecinos.

«Nosotros no paramos, esta mañana (por ayer viernes) hemos desinfectado 15 comunidades de vecinos», explican desde la dirección de Aerosol, que hasta ahora limitaba sus actuaciones vecinales a la desinfección de plagas de cucarachas, principalmente. «Ahora ya no actuamos contra las plagas, tenemos que priorizar y la crisis sanitaria nos obliga a limitarnos a desinfectar», añaden.

A precio de coste, limpian todas las zonas comunes, desde los pomos de las puertas, los enchufes, los interruptores, los ascensores, trasteros, rellanos y las barandillas. «Todo lo que sean zonas de tránsito y se pueda tocar con las manos», explican. Para ello utilizan un producto desinfectante especial contra el coronavirus que no es tóxico ni corrosivo, pero sí 100% biodegradable y con sello ecológico.

Desde Aerosol explican que en las viviendas no actúan, aunque han tenido algún caso aislado donde el residente ha sido contagiado por coronavirus que ha precisado de sus servicios de limpieza. «En este caso extremamos las precauciones y utilizamos Epis (trajes de buzo completos con guantes, mascarillas y pantallas)», explican.

También han visto incrementado el número de servicios de las empresas que siguen operativas a día de hoy. Hay otras, como las farmacias, almacenes o similares, que requieren de un mantenimiento diario y que priorizan en su apretado calendario.