El compromiso adquirido por los partidos que han firmado la investidura de Javier Lambán a la presidencia del Gobierno de Aragón de derogar el Impuestos sobre la Contaminación de las Aguas (ICA) ha sido recibido con «satisfacción» por entidades como la Red de Agua Pública (Rapa) y otros colectivos contrarios al impuesto. A partir de este momento exigen una «retirada inmediata» del mismo, que no se emitan más recibos en Zaragoza y que se paralicen «los procedimientos contra las familias que no pagaron» sus facturas.

Por el momento, sobre la mesa del nuevo Ejecutivo está el compromiso de «estudiar y establecer» una nueva figura tributaria más razonable y justa que permita obtener ingresos medioambientales. «Este compromiso ha sido posible alcanzarlo como consecuencia de la movilización social contra el ICA, muy especialmente de la respuesta social de la ciudadanía de Zaragoza contra la imposición de una doble tributación sobre la depuración de las aguas residuales», celebran las entidades que se han manifestado contra el tributo.

La renuncia al cobro del ICA va aparejada a una modificación de los planes de saneamiento en la comunidad que ya se había iniciado durante la pasada legislatura. «Se abre así una oportunidad inmejorable de empezar a abordar la gestión hidráulica en Aragón desde criterios de interés público y sostenibilidad ambiental, atendiendo al vector de la emergencia climática que debe condicionar en el futuro todas las políticas industriales y agroambientales», indican los portavoces de la entidad.

Al respecto de los vecinos que no pagaron en su día el recibo (más de 100.000 hogares en Zaragoza), consideran que se deben paralizar los expedientes sancionadores que eso haya podido acarrear. «Han ayudado con su gesto a hacer patente este problema y a resolverlo en beneficio de toda la ciudadanía de Aragón», indican. Piden, además, un trato similar para los ayuntamientos con expedientes abiertos por motivos similares.