La Cruz Roja en Huesca ha advertido hoy que en 2013 se incrementaron en la provincia altoaragonesa los casos de "pobreza vergonzante", de personas que recurrieron a la organización ante el inminente corte de suministros en sus viviendas.
Así lo ha asegurado en rueda de prensa el coordinador de Cruz Roja en Huesca, Sifro González, durante la presentación de la Memoria de Actividades de la organización en Huesca durante el año pasado.
El responsable de Cruz Roja ha explicado que en el marco del programa de Intervención Social y Empleo, destinado a combatir la pobreza y la exclusión social, se atendió el año pasado a 1.200 familias, cifras que, según ha afirmado, se han incrementado en un 8 por ciento durante el primer trimestre de 2014.
A través de este programa, Cruz Roja entregó el año pasado, por vez primera, ayudas directas para cubrir las necesidades más urgentes de las familias afectadas.
González ha explicado que la organización ha detectado un cambio en el perfil de las familias atendidas, al descender de forma significativa la atención a la población inmigrante e incrementarse los casos de la referida "pobreza vergonzante".
La memoria de Cruz Roja en Huesca informa, además, de un incremento en el reparto de alimentos y de la puesta en marcha de aulas de formación para atender la demanda social de personas interesadas en aprender nuevos oficios.
Entre los programas más importantes desarrollados, González ha incidido en el servicio de teleasistencia domiciliaria y móvil, así como el destinado a mantener localizadas a mujeres víctimas de violencia de género y el referido a la localización de personas con deterioro cognitivo.
Cruz Roja en Huesca cuenta con un presupuesto anual de 4 millones de euros financiados en un cincuenta por ciento con ayudas directas de la administración, y en el resto a través de las aportaciones de los 16.000 socios de la organización en la provincia.
