Zaragoza recibe hoy, de la mano de Cruz Roja, a 24 personas, que han solicitado protección internacional como refugiados en España procedentes de cinco países: El Salvador, Ucrania, Honduras, Venezuela y Siria. Se trata de siete familias, que llegan con diez menores entre 2 y 17 años, y mañana llegará un varón que viene solo de nacionalidad albanesa. Se suman a los 38 refugiados que Cruz Roja atiende en Zaragoza.

La diferencia respecto a los que llegaron en julio reasentados desde los campos de refugiados sirios es que «los que vienen hoy y mañana lo hacen desde el servicio de primera acogida del sistema de protección internacional, es decir, llegaron a España por sus medios y solicitan asilo una vez aquí», explica Julián Martínez, director del área de intervención social de Cruz Roja en Zaragoza. Es probable, incluso, que algunos de ellos «lleven tiempo de manera irregular en nuestro país hasta que han pedido el asilo».

En el transcurso de la mañana, irán llegando desde Bilbao, Barcelona y desde el centro de acogida de Puente Genil. Una vez en Zaragoza entrarán en la fase de acogida temporal que les proporciona ayuda durante seis meses. En este tiempo recibirán alojamiento y servicios de acogida en primera fase, es decir, clases para aprender el idioma, escolarización de los niños, gestión de documentación sanitaria y legalización administrativa, entre otros, y ayuda psicológica.

La procedencia de los países hace que cada uno presente unas necesidades y unas características diferentes en el proceso de adaptación a la sociedad aragonesa. «Cada expediente de asilo es un mundo», asegura Martínez.

Desde El Salvador viene una familia con su hijo de dos años. Según Martínez, el motivo de los que huyen de ese país suele ser que están amenazados por las maras. Desde Venezuela llegan otras dos unidades familiares, y otra desde Honduras. Los que llegan hablando otro idioma, en este caso proceden de Ucrania, Siria y Albania. Entre 2015 y 2016 llegaron a Aragón casi 300 personas solicitantes de asilo.