Ciudadanos solicitó ayer la Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) que paralice «inmediatamente» los pliegos del servicio de atención a domicilio del Ayuntamiento de Zaragoza para que se puedan volver a negociar unas nuevas condiciones, ya que las actuales «no satisfacen a nadie, aseguró la concejala de la formación naranja, Cristina García.

Explicó que la parte más conflictiva de estos pliegos es el precio por hora, que se incrementa un 3,41 %, lo que supone una subida de 50 céntimos en los últimos diez años.

La edila denunció que las condiciones recogidas en los pliegos «vulneran los derechos laborales y no satisfacen a nadie», por lo que ha pedido que se cree una comisión de negociación con todos los agentes implicados.

«La señora Broto -la concejala de Derechos Sociales- dio a entender que no se van a paralizar. Actualmente hay varios recursos en el TACPA (Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón) y lo que queremos es que uno de los contratos más importantes del «ayuntamiento cuente con unos pliegos de calidad», apuntó en relación a la posición de la vicealcaldesa y concejala Luisa Broto.

García dejó claro que es necesario alcanzar un acuerdo con los actores implicados para satisfacer a todas las partes. En este sentido, criticó que para elaborar estos pliegos se llevaron a cabo dos procesos participativos «que no se han respetado», puesto que las propuestas acordadas en ese foro «apenas se han incluido».

En el último pleno, las trabajadoras afectadas manifestaron su rechazo y criticaron duramente que la concejala del área no escuche sus reivindicaciones. Además de desplegar carteles de protesta, aseguraron públicamente y ante la propia Broto, que los pliegos que ha diseñado mermarán sus condicionales laborales, ya que ni se mejoran ni se contempla una revisión de precios anual, algo que suelen incluir los contratos de larga duración. De hecho, llevan años con sus sueldos congelados.