El sindicato CSI-CSIF volvió a criticar ayer la situación de la nueva lavandería del hospital Miguel Servet, cuyo funcionamiento calificó de "tercermundista" y "vergonzoso". "No hay personal adecuado, las instalaciones no están adaptadas en cuanto a seguridad laboral y el transporte de la ropa sigue causando accidentes", explicó ayer Elena García Domeque, delegada de CSI-CSIF. "Aunque son más ligeros que los que había al principio, los carros siguen siendo muy pesados y los celadores los tienen que llevar cargados de ropa hasta la general", denunció la delegada sindical. "El desastre llega a tal punto que a veces se lleva la ropa de infecciosos mezclada con la limpia y la sucia de otras plantas", añade. Según García Domeque, "la nueva lavandería es muy bonita pero tiene unos problemas tremendos y carece de técnicos que conozcan su manejo, con lo que la mitad de la ropa sale quemada".
La dirección asegura, sin embargo, que los problemas detectados en mayo y junio fueron "circunstanciales". Los responsables del centro añaden que ahora la instalación funciona bien y ya ha sido capaz de asumir la limpieza de la ropa de los hospitales Infantil, Militar y Ernest Lluch de Calatayud, además del Servet. Este último centro acaba de invertir unos 360.000 euros en comprar nueva ropa de cama para el hospital, una inversión que, según CSI-CSIF es "insuficiente" para solucionar el "nefasto" funcionamiento de la nueva lavandería. El resto de los sindicatos dijeron no tener constancia de este nuevo problema.
