El sindicato CSI-F ha votado en contra del Plan de Empleo del Personal de la Residencia de la Tercera Edad de Movera en la mesa sectorial del Gobierno de Aragón porque su negociación se inició tarde y proponía la amortización de 115 puestos de trabajo y la privatización del servicio.

Según ha indicado el sindicato en un comunicado, su negativa ha obligado a la administración a aceptar la redistribución de 29 puestos de trabajo y la creación de otros tantos nuevos que reforzarán la dotación de las plantillas de otros centros del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS).

Pese a ello, CSI-F considera que las necesidades reales de personal de la red del IASS "distarán mucho de quedar cubiertas" y denuncia que la administración permita e impulse que un servicio público esencial como éste pierda calidad progresivamente para así "favorecer procesos privatizadores".