El sindicato CSI-F ha pedido hoy a la administración educativa que se persone como parte acusadora por la agresión sufrida en un colegio de Épila por una maestra, a la que golpeó la madre de un alumno de cinco años.

La organización ha expresado hoy en un comunicado su "más enérgica repulsa" por la agresión sufrida por la maestra del CEIP Gaspar Remiro de Épila y su "más profundo apoyo y solidaridad" con la docente.

El CSI-F pide que se aplique "con todo rigor" la ley y que la administración Educativa ponga en marcha todas las medidas de apoyo y ayuda con esta profesional y "se persone" como parte acusadora ante un delito de atentado a la autoridad.

Para este sindicato, hay que fomentar desde todos los ámbitos el respeto al profesorado para procurar el adecuado clima de convivencia en los centros educativos y garantizar asimismo el derecho a la educación del alumnado.