Las intolerancias alimentarias acaparan páginas y portadas en escritos o internet, pero los expertos tienen claro que hay poca base científica en estos textos y advierten del peligro de tomarse estas citas "al pie de la letra". "A pesar de la cantidad de gente afectada, no hay estudios que identifiquen factores de riesgo y este vacío científico puede ser debido a que se trata de un problema menor al no afectar a la salud", indican los especialistas, que reconocen, en este sentido, que los estudios en este terreno son difíciles de diseñar bien y de ejecutar. "En conclusión, podemos decir que cualquier persona está expuesta a padecer una intolerancia", indica.