Cuatro de los doce premios de la XVII edición del Premio Nacional Don Bosco, que se otorgaron ayer en Zaragoza, han correspondido este año a trabajos presentados por alumnos aragoneses de ciclos formativos superiores. Con estos galardones, entregados a un total de quince participantes, se recompensan los proyectos de diseño e innovación tecnológica realizados por estudiantes de formación profesional y de bachillerato de todo el país.

El acto de entrega de los premios, celebrado ayer en el colegio Salesianos de Zaragoza, contó con la presencia del consejero aragonés de Industria, Arturo Aliaga, y se inició con una conferencia de la consejera de Ciencia, Tecnología y Universidad, María Teresa Verde Arribas.

Al premio se presentaron en una primera fase un total de 161 proyectos procedentes de centros de enseñanza de 14 comunidades. Aragón concurrió con nueve proyectos.

El concurso consta de cinco primeros premios, cinco accésit y dos premios especiales, uno a la mejor exposición y documentación, entregado a Vanesa Pasamón Esteban, de Salesianos de Zaragoza por un trabajo sobre la geografía de Aragón, y otro a la mayor trascendencia social, otorgado a Laura Rubio y María Monserrat Laporta, de Salesianos también, por un programa para familiares de pacientes de cáncer. Están dotados con 1.200 euros.

DOTACION ECONOMICA Los cinco primeros premios (dotados con 2.200 euros) correspondieron a un control de fallos de fabricación con visión artificial (Salesianos de Zaragoza), a un telecontrol de invernadero (Salesianos de Sant Vi§ens dels Horts, Barcelona), a un acceso vía GSM a párkings (Calahorra), a un proyecto de recuperación del patrimonio industrial aragonés ejecutado por dos alumnas del instituto Avempace, de Zaragoza, y a un estudio medioambiental de la bahía de Pasajes, de La Anunciata (San Sebastián).

Los cinco accésit (dotados con 1.100 euros) fueron para un estudio energético y medioambiental de un instituto, un sistema para descargar embutidos (ambos de Olot, Gerona), un cuentacuentos interactivo (Madrid), un equipo de telediagnóstico para aparatos electrónicos (Orihuela, Alicante) y un asiento para inválidos (Miranda, Burgos).