El consejero municipal de Servicios Públicos y Personal, Alberto Cubero, ha dado cuenta hoy del estudio que ha elaborado una consultora sobre la recogida selectiva de basura orgánica en la ciudad, que establece cuatro modalidades diferentes en función de las características de la zona.

Estas son el Centro y el Casco Histórico, donde frecuentemente se recoge la basura en los propios portales; Valdespartera, donde se da la recogida neumática; los barrios rurales, con mayoría de viviendas unifamiliares; y el resto de la ciudad, que aglutina a tres cuartas partes de la población, ha informado Cubero en declaraciones a los medios.

En función de ello, el estudio indica diferentes modos de prestación del servicio, de los que "la experiencia más positiva" consistiría en implantar un quinto contenedor en la isla de contenedores.

Además, para Valdespartera plantea que uno de dichos agujeros sea destinado a la recogida selectiva de materia orgánica, en los barrios rurales, desarrollar experiencias de compostajes o de recogida puerta a puerta, y en el Centro y el Casco Histórico, la recogida en días alternos.

Ahora, Cubero ha apostado por dar el tiempo necesario para estudiar el documento y para abrir un debate en el conjunto de la ciudad, que comenzará en marzo con una convocatoria junto a la consultora y el tejido social para y, a partir de ahí, recoger propuestas, decidir el modelo y preparar una prueba piloto, que espera se produzca este mismo año o a principios de 2018.

A su juicio, los beneficios de la recogida selectiva de materia orgánica son "evidentes" tanto a nivel ecológico como económico y cree que existe consenso, por lo que ha abogado por seguir avanzando "sin prisas pero sin pausas".

Los costes difieren según las modalidades y se sitúan en unas horquillas de entre 2 y 7 millones de euros, ha señalado el consejero, quien se ha comprometido además a que lo que decida el Ayuntamiento se hará con el consenso del tejido social y del resto de grupos políticos.