La deuda pública autonómica también sigue disparada, y en los últimos doce meses, lejos de reducirse, creció en 750 millones, superando por vez primera los 6.000 millones de euros (más de un presupuesto anual total). Un aspecto preocupante puesto que obliga además a pagar mensualmente un elevado número de intereses. Aragón ha mejorado su calificación crediticia, que está en BBB según Standard and Poor's y ha refinanciado 425 millones de su deuda al interés más bajo de la historia para una comunidad autónoma, y se podrán ahorrar este año unos 12 millones en intereses.