El Consejo de Gobierno de Aragón ha declarado hoy inversiones de interés autonómico tres nuevos proyectos de energías renovables, dos plantas fotovoltaicas en las localidades altoaragonesas de Chimillas y Poleñino y un parque eólico en Fuentes de Ebro (Zaragoza).
Según informa el Ejecutivo autonómico, la declaración obtenida facilitará a las empresas promotoras de los proyectos una tramitación administrativa "preferente" que reducirá a la mitad los plazos ordinarios para la consecución de los permisos.
La inversión global prevista para estos tres proyectos asciende a más de 34 millones de euros, con una estimación de los promotores de creación de alrededor de 250 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, durante su construcción.
Los proyectos de energía fotovoltaica a construir en las localidades de Chimillas y Poleñino tendrán una potencia instalada de 25 y de 30 megavatios, respectivamente.
Estas dos plantas supondrán una inversión aproximada de 27.450.000 euros y, según las estimaciones del promotor, generarán 100 puestos de trabajo directos y 50 indirectos en la fase de construcción, que se prolongará durante unos 10 meses.
Además, se crearán cuatro puestos más de alta especialización para las labores de mantenimiento durante la fase de explotación de ambas plantas durante el periodo de explotación de 30 años.
Según las fuentes citadas, al beneficio económico de estas plantas se sumará el medioambiental ya que evitarán la emisión a la atmósfera de unas 82.776 toneladas de CO2 al año.
Estas estimaciones son consideradas muy relevantes, en especial, para el desarrollo de los municipios de Chimillas y Poleñino, ubicados en las comarcas de Hoya de Huesca y Monegros, respectivamente, y que cuentan con una población total, entre ambos, de 594 habitantes.
Además de la creación de riqueza y empleo en el territorio, estas inversiones favorecen la producción energética en Aragón, aseguran las referidas fuentes.
Por su parte, el parque eólico previsto construir en Fuentes de Ebro tendrá una potencia instalada de 6 megavatios, y su construcción, presupuestada en 7 millones de euros, favorecerá la creación de cien puestos de trabajo y su mantenimiento durante un periodo de seis a doce meses.
En la fase de explotación, durante los próximos 25 años, se requerirá personal de alto grado de especialización para las labores de mantenimiento.
Estas declaraciones responden a los nuevos criterios establecidos por el Gobierno de Aragón en febrero de 2017 que permiten desarrollar políticas públicas para impulsar el crecimiento de la energía de origen renovable en la Comunidad y facilitar la implantación de este tipo de proyectos en nuestro territorio.
Los tres proyectos que han recibido la declaración este viernes están promovidos por empresas que resultaron adjudicatarias en la tercera subasta estatal de energía renovable, celebrada el 26 de julio de 2017.
Éste es uno de los criterios, junto con su ubicación en la zona de las cuencas mineras, para conceder a este tipo de proyectos un trato prioritario por parte de la administración autonómica.
