La Inspección General de Sanidad del Ministerio de Defensa deberá determinar si adopta medidas disciplinarias contra un médico de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Militar de Zaragoza, tras la denuncia por acoso laboral interpuesta por las once enfermeras que trabajan en dicho servicio.

El ministerio deberá estudiar las conclusiones que se derivan del expediente informativo realizado por la dirección del hospital Militar de Zaragoza para esclarecer los hechos, y que ayer mismo le fue remitido.

Al parecer, los hechos guardan una estrecha relación con la "fuerte tensión" que se vivía en el servicio, provocada por el "carácter particular" del médico denunciado, un militar de unos 50 años, especialista en intensivos.

"La denuncia habla de acoso laboral, pero ligado sobre todo a la tensión que desencadenaban sus formas y su falta de tacto. Esto mantenía a disgusto a las trabajadoras y creaba una tensión, que indudablemente era captada por los propios pacientes, aunque en ningún caso, los enfermos han sido objeto de mal trato", aseguró a este diario el general director del hospital de la Defensa de Zaragoza, Rafael Pérez García.

Con el fin de conocer con detalle los hechos, la dirección nombró un instructor para llevar a cabo dicho expediente informativo, que concluyó el lunes y que ayer fue enviado a Madrid.

Esta decisión se adoptó después de que las once enfermeras que trabajan en la única UCI que existe en el hospital entregaran ante la dirección una denuncia firmada por todas ellas en la que advertían del acoso laboral que venían padeciendo por parte de este especialista y que repercutía en la estancia de los pacientes.

El teniente coronel E. A. C., contra el que va dirigido el escrito, llegó procedente de Burgos hace un año, cuando solicitó el traslado por el cierre de su hospital. Este especialista cuenta con una dilatada experiencia como intensivista en la localidad burgalesa.

Hasta que se conozcan las medidas que adopta el Ministerio de Defensa, este médico continuará apartado de las tareas asistenciales, aunque seguirá acudiendo a su puesto de trabajo. Asimismo, en las guardias médicas, con turnos de 24 horas, estará acompañado por otro especialista. La UCI del hospital Militar dispone de seis camas, con una ocupación media diaria de dos o tres.