El Ministerio de Defensa no organizará el viaje para las familias del Yak-42 que desean viajar a Turquía con el objetivo de cotejar su ADN con las muestras de tejidos de los 62 militares muertos que guarda el Instituto de Toxicología de Estambul. A pesar de que aún queda más de un mes hasta que José Luis Rodríguez Zapatero tome posesión de la presidencia, Defensa deja en manos del futuro Gobierno la decisión de fletar un vuelo para los allegados.

En una carta enviada a las familias por el secretario general de Política de Defensa en funciones, Javier Jiménez-Ugarte, y a la que tuvo acceso EL PERIODICO DE ARAGON, el número tres del ministerio señala que la decisiones finales deberá tomarlas "el nuevo Gobierno que resulte de las inminentes elecciones". La misiva está fechada el 12 de marzo, justo un día después de los atentados de Madrid y cuando la autoría de Al Qaeda cobraba gran fuerza.

A pesar de dejar claro que el actual equipo del departamento no actuará, Jiménez-Ugarte vuelve a insistir en la posibilidad de realizar los exámenes por vía diplomática: "No resulta imprescindible el desplazamiento a Estambul, pudiendo ser suficiente el envío de las muestras". Los afectados siempre han mostrado su rechazo a esta posibilidad.

Defensa agrega que las pruebas más exactas corresponderían al padre y a la madre de la víctima. Por eso, salvo excepciones, se limita la representación de cada familia a un máximo de dos personas.

Algunas viudas como Ana Ochoa criticaron con dureza la actitud del Gobierno español. "Es lamentable que se laven las manos de esta manera. Ni siquiera actúan con clase ahora que dejan el poder", remarcó la afectada. Por su parte, el presidente de la Asociación de Familiares del Yak-42, Carlos Ripollés se mostró "confiado" ante la promesa de Zapatero de investigar la tragedia.

Respecto al informe de la Comisión Internacional sobre las causas del siniestro, Jiménez-Ugarte advierte de que el proceso podría demorarse durante muchos meses, por lo que el ministro de Transportes turco ha pedido al organismo que acelere "al máximo las gestiones".