A dos direcciones generales del Ministerio de Defensa --la de Infraestructuras y la de Armamento-- "no les constaba o no tenían conocimiento de la existencia de ningún convenio con empresas civiles para realizar pruebas con munición o explosivos" en San Gregorio. Y el jefe del campo declaró que les dan permisos genéricos "para todo tipo de armas, no especificándose ni facilitándose por parte de la empresa dato alguno sobre la munición, normalmente experimental, que se va a disparar". "Se sabe la fecha en la que van a realizar prácticas de tiro (...) pero se desconoce el tipo de munición --y sus características-- que van a disparar", concluye la jueza.