El Ministerio de Defensa desplazará a Kosovo a partir de mañana a unos 650 militares de la Brigada de Caballería Castillejos II --un tercio de su plantilla total-- después de que los recientes enfrentamientos registrados entre albaneses y serbios hayan echado por tierra los planes de la OTAN para reducir sus 17.500 efectivos en la zona.

La decisión de Defensa dejará en cuadro a la brigada zaragozana, cuyos mandos tendrán que instruir con urgencia a unos 400 hombres para partir en las próximas semanas --y mantener así a los cerca de 650 soldados que España posee actualmente en la zona--. Muchos militares irán a Kosovo obligados ante la necesidad de más efectivos.

La brigada verá mermada por tanto su capacidad operativa por el amplio dispositivo exigido, que hasta el pasado martes se cifraba únicamente en 248 militares. "Hay un regimiento que se quedará con unos 120 efectivos menos de los que debería. Y algunos soldados apenas tendrán tiempo para organizar su viaje, porque se les ha avisado con prisas o porque acaban de ingresar en Castillejos tras su proceso de formación", indicaron fuentes castrenses a EL PERIODICO DE ARAGON.

Inicialmente, la Brigada de Caballería Castillejos II debía encargarse de realizar los dos últimos relevos y de cerrar la misión española en Kosovo, de manera que la presencia de tropas españolas iba a reducirse progresivamente dentro del plan general de la Alianza Atlántica.

Pero las recientes disputas registradas entre serbios y albaneses, que se han cobrado unos 30 muertos, más de 1.000 heridos y más de 3.600 desplazados, han obligado a la OTAN a adoptar una nueva estrategia, que ha afectado directamente a los militares aragoneses en los últimos días. Algunos se muestran "confundidos" por las decisiones que se han adoptado para dar forma a la Agrupación Española en Kosovo (KSPAGT XI).

Además, los miembros de la KSPAGT XI se marcharán sin saber con exactitud cuánto tiempo durará su misión de pacificación y estabilización de la provincia.

"Las indicaciones han sido claras: todo dependerá de cómo evolucionen los acontecimientos. Todavía no se sabe si el trabajo durará unos cuatro meses o seis, aunque no me extrañaría que alguno tenga que permanecer hasta diciembre, si finalmente el trabajo español concluye en esas fechas", agregaron dichas fuentes.

MODIFICACIONES EN LOS ACTOS Tal y como sucedió con los primeros soldados que partieron hacia Irak el pasado mes de julio desde Zaragoza, Defensa ha prohibido asistir a la prensa a la despedida oficial, que se celebra hoy en el cuartel General Ricardos, sede de la brigada. Otras fuentes militares señalaron que la decisión del departamento dirigido por Federico Trillo sólo puede deberse a dos razones: al deseo de que las tropas no hablen sobre la tensión surgida en la provincia serbia en los últimos días o al malestar por los continuos cambios en el diseño del contigente.

"Una vez más, Defensa quiere mandar a los soldados a escondidas, como si tuvieran algo que ocultar", indicaron otras fuentes militares.

En principio, estaba previsto que el jefe del contingente, el coronel Alfonso de la Rosa Morena, recibiera a los medios de comunicación hoy, durante el acto de despedida de la Agrupación Española en Kosovo (KSPAGT XI). Posteriormente, se comunicó un aplazamiento de los vuelos a los Balcanes y de los homenajes durante dos o tres semanas.

Sin embargo, finalmente los primeros militares partirán mañana a las 10.30 horas desde la Base Aérea de Zaragoza en un avión fletado por la compañía Air Europa con el adiós de sus familias y del general jefe de la Brigada, Fernando Baró, pero sin periodistas cerca. Y el próximo lunes habrá un segundo vuelo, pocas horas antes del viaje de los logísticos hacia Irak.

Las tropas españolas se encuadran dentro de la Brigada Multinacional Suroeste de la KFOR, bajo mando italo-germano.