La Delegación del Gobierno en Aragón ha iniciado gestiones con las autoridades francesas para buscar una solución a la prohibición impuesta por Francia para la denominada ruta motociclista de los Penitentes.

Pese a que nadie se ha dirigido a la Delegación del Gobierno para solicitar amparo, según subrayó la institución ayer en una nota de prensa, a través de la subdelegación en Huesca se ha hablado con la Subprefectura de Olorón y con la Prefectura de los Pirineos Atlánticos para aclarar las acusaciones de «atentado contra el orden público» que han utilizado las autoridades galas para prohibir la marcha.

Estos hechos, según la Delegación del Gobierno en Aragón, no se produjeron en la edición del pasado año, si bien hubo 176 infracciones de la Ley de Seguridad Vial y un accidente con un herido grave.

Las negociaciones entre ambas autoridades han abierto la posibilidad de que los organizadores de la ruta de los Penitentes puedan solicitar una reunión que estudie otra fecha para la marcha motera, al considerar que el puente del Primero de Mayo es un momento «inapropiado» debido al elevado volumen de tráfico que soportan las carreteras.

Por lo tanto, se podría señalar otra fecha con condiciones adecuadas para realizar la ruta deportivo-turística, que mide 800 kilómetros y congrega a alrededor de 400 aficionados de diferentes comunidades y países.