Mientras unos dicen que España empieza a notar los efectos de la salida de la crisis, los datos demuestran que, o no es así o no lo está siendo igual para todos. En los tres primeros meses del año las solicitudes de ayudas de urgente necesidad registradas en el Ayuntamiento de Zaragoza se han incrementado un 14% respecto al mismo periodo del 2016. Hasta el 31 de marzo ha habido 10.008 peticiones. Se rompe, por tanto, la tendencia a la baja que se había registrado en el ejercicio anterior.

Los números no mienten y las consecuencias de la dura crisis se siguen notando. Desde el área de Derechos Sociales explicaron ayer que este incremento puede deberse a una «cronificación» de la pobreza. Según indicaron, se trata de núcleos familiares que no requieren de subvenciones de larga duración -como el Ingreso Aragonés de Inserción (IAI)- ya que perciben ingresos económicos pero que no son suficientes para atender todos los gastos que genera un hogar.

La concejala de Derechos Sociales, Luisa Broto, informó ayer, a pregunta de CHA, que este incremento está relacionado con el aumento en el número de familias diferentes atendidas por los servicios municipales, de un 10% respecto al primer trimestre del 2016. En los tres primeros meses han entrado en los servicios sociales 5.300 familias nuevas.

Otra de las peculiaridades que se está produciendo es que casi el 50% de las más de 10.000 solicitudes son ayudas de alimentación. Según Broto, esto demuestra que existe un «contexto de precariedad estructural» en el que cada vez hay más familias que necesitan acceder a una ayuda puntual de los servicios públicos para «subsistir».

INGRESO ARAGONÉS / En tres meses se ha roto la tendencia del año pasado, cuando las peticiones se redujeron considerablemente como consecuencia de la mejora en la tramitación por parte del Gobierno de Aragón del IAI. Sin embargo, Broto explicó ayer que, en esta ocasión, no existe correlación entre las ayudas urgentes y el IAI. A lo largo del primer trimestre se han tramitado 2.133 solicitudes, frente a las 2.235 del mismo periodo del año pasado. Es decir, que, en este caso, las solicitudes se han reducido un 4,56%. Además, el 57,29% de las peticiones son de renovación, porcentaje muy similar al del año pasado, cuando representaron el 58,48%.

La concejala informó que por cada 100 solicitudes propuestas por el consistorio al Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), se han recibido 47,12 resoluciones.

LOS TIEMPOS / El tiempo medio de tramitación de las ayudas es vital. Actualmente, la media se ha reducido a los 11 días, según explicó ayer la concejala.

Los centros municipales han atendido durante el primer trimestre del año 20.902 citas, con una media de 15 días para concertarla. Se ha reducido un día respecto al año pasado en el 60% de los centros, salvo en los de la Magdalena, San Pablo y San José, que por la población que conforma el distrito la media asciende considerablemente hasta los 20 días. En el que caso de las primeras citas, según explicó ayer Broto, la media ronda los 17 días frente a los 23 del año pasado.

El caso del distrito de San José es una excepción y «grave», como admitió la vicealcaldesa, ya que se manejan plazos de 39 días de media. La concejala anunció que se está trabajando en encontrar una solución que pasará por crear dos centros y redoblar el personal, algo que ya ha comenzado a hacerse con más de diez nuevas contrataciones. La portavoz del PSOE, Lola Ranera, criticó al Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) por no cumplir «con sus propios objetivos, de los que están bastante lejos».

La concejala quiso recalcar que, en el caso de las ayudas de urgencia, los plazos siempre se aminoran al máximo ya que tienen preferencia respecto al resto de peticiones.