Los comportamientos racistas entre la sociedad aragonesa han aumentado durante el año 2003, según informó ayer la organización SOS Racismo Aragón. La portavoz en Zaragoza de la ONG, Sofía Bernardo, explicó durante la presentación del Informe Anual 2003 que cada vez son más las personas en "situación irregular que, aun así, deben seguir trabajando, lo que propicia el aumento de la explotación laboral y el número de accidentes".

El informe también recoge la vulneración de los derechos del menor, la violación de los derechos sociales, el movimiento organizado de los neonazis y la actitud de la ciudadanía ante esta realidad. "Cada vez se expresan las ideas xenófobas con menos disimulo, tanto en el conjunto de la sociedad, como por parte de responsables políticos", según recoge el estudio.

TRATAMIENTO POLITICO La encargada de la oficina de información de SOS Racismo Aragón, Katrina Belsue, explicó que a juicio de la ONG, las competencias sobre inmigración en la comunidad "no han tenido un tratamiento adecuado", ya que han pasado por distintos departamentos para ubicarlas definitivamente en el de Economía, "un lugar --a su juicio-- poco apropiado, ya que los inmigrantes pueden pasar a ser vistos como mano de obra".

La portavoz de SOS Aragón, Sofía Bernardo, también se refirió al "uso electoralista que se había hecho de la inmigración". En su opinión, las pasadas elecciones del 14-M "han potenciado los miedos de la población, ya que se ha equiparado el concepto de inmigración al concepto de violencia". Una idea propiciada por los trágicos sucesos ocurridos en Madrid, y de los que, según Sofía Bernardo, "no se puede ni se debe culpar a un colectivo entero, sino que hay que clarificar quiénes son los responsables".

En su informe nacional, SOS Racismo denuncia la "alarmante" vulneración de los derechos y libertades en España durante 2003 y reclama al nuevo Gobierno que reforme la ley de extranjería y otras normas "discriminatorias" que, a su juicio, han propiciado que la cifra de extranjeros en situación irregular llegue al millón de personas.