Las asociaciones de madres y padres de los colegios de Zaragoza Tío Jorge, Agustina de Aragón, San Braulio, César Augusto, Doctor Azúa y El Espartidero, todos ellos con comedores autogestionados por las familias, denunciaron ayer la demora por parte del Departamento de Educación en el pago de las becas de comedor de este curso. «Es un problema que venimos sufriendo año tras año», aseguraron.

Estos colectivos, que forman parte de la Plataforma por unos Comedores Escolares Públicos de Calidad, indicaron que este curso «todavía no se ha efectuado ningún ingreso» desde la DGA y exigieron «un compromiso» de la Administración respecto a este tema. «Deberían efectuar dicho pago de forma periódica y estable a partir de ahora. Además, se adeudan los importes de los menús de las monitores de comedor y de los equipos directivos de los centros», apuntaron.

En este sentido, estas asociaciones de padres y madres indicaron que durante los dos últimos años «la DGA ha tenido que pagar déficits de comedor en la mayoría de los colegios que son gestionados mediante empresas de catering, mientras que en los comedores con autogestión no ha existido dicho déficit, ya que los gastos no deben superar los ingresos», argumentaron.

ESTA SEMANA

«No entendemos que si el alumnado debe de pagar por adelantado el servicio, la Administración no dote de provisión al centro el pago de las becas y de menús».

Por su parte, fuentes del Departamento de Educación indicaron a este diario que «el 80% de la cuantía se pagará esta misma semana y el resto llegará en breve», indicaron.

Al parecer, la semana pasada desde la consejería ya se pusieron en contacto, a través de un email, con el Tío Jorge, Agustina de Aragón, San Braulio, César Augusto, Doctor Azúa y El Espartidero.

Las familias apuntaron, además, que los comedores gestionados directamente por estas asociaciones, en colaboración con el centro educativo, tienen «una gran cantidad de problemas» a la hora de poder obtener financiación externa.

El alumno becado en estos colegios alcanza el 38% de los usuarios de comedor, lo que supone una pérdida de ingresos anuales de 61.060 euros, según detallaron las asociaciones, «con el perjuicio que conlleva para la correcta gestión».

Desde la plataforma defendieron «el alto uso» del comedor por parte del alumnado en estos centros autogestionados, así como el grado de satisfacción con el servicio.