La Asociación de Técnicos en Emergencias Sanitarias de Aragón (Atretansa), junto a sindicatos como CGT o CSIF, denuncian que, en las dos últimas semanas, se han producido hasta seis agresiones de pacientes al personal de ambulancias en la comunidad. Se trata de acciones verbales, pero también físicas.

Ante esta situación piden a las empresas concesionarias de transporte sanitario (Acciona y Nuevos Transportes Sanitarios de Aragón) que pongan en marcha un protocolo de actuación que incluya la actuación y la presencia de la Policía. Según CGT, el fin de semana hubo cuatro agresiones a sanitarios de ambulancias mientras trataban de atender a personas en estado de embriaguez. Estas se suman a las dos ocurridas la semana anterior.

Al parecer, el lunes un paciente agredió a una profesional y, ya dentro de la ambulancia, hizo lo propio con un médico de la UVI y un trabajador en prácticas. El martes, según el sindicato, otro compañero fue atacado cuando auxiliaba a otra persona que estaba bajo los efectos del alcohol. «El comité de empresa ya lleva tiempo avisando a Acciona de estos problemas, pero a pesar de las reiteradas denuncia a la empresa ni el 061, ni la DGA ni Acciona han tomado medidas», comentó Enrique Alonso, delegado de CGT en el omité de Prevención.

Este sindicato exige, entre otras cosas, un protocolo de actuación y también que se adopten medidas para intentar evitar estas situaciones como, por ejemplo, la puesta en marcha del botón del pánico. Este ya existe para los médicos de Atención Primaria y alerta en cuestión de segundos a la Policía en casos de agresión. Por su parte, desde Atretansa también han denunciado las agresiones en las redes sociales y han iniciado una campaña para sensibilizar de los hechos.

También CSIF se refirió a «la falta de protocolos conjuntos» del 112, el 061 Aragón y las empresas Acciona y NTSA cuando se envían ambulancias para atención sanitaria. «No entendemos cuál es la complicación para que los recursos de Policía Nacional y Local puedan dar cobertura».

CONDENA

En este sentido citaron, por ejemplo, que cuando se envía una ambulancia a un servicio por agresión, por una borrachera, se desconoce «cuánto tiempo lleva esperando la víctima o si habrá presencia policial». «Cuando la asistencia es en un domicilio por un posible paciente psiquiátrico son los sanitarios los que requieren que acuda la Policía, pero en innumerables ocasiones no se envía porque es la central del 061 quien decide qué recurso se envía», indicaron.

Por su parte, fuentes del Salud manifestaron ayer su «condena rotunda» hacia todas las agresiones y su «compromiso» para prevenirlas «en la medida de los posible, si bien el riesgo cero no existe», añadieron. También apuntaron que han trasladado al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de las empresas el protocolo contra las agresiones del Salud para que lo adapte a las particularidades del servicio.