Un niño de ocho años murió en la madrugada de ayer electrocutado en Sabiñánigo cuando hacía cola en la plataforma de una atracción de feria denominada el saltamontes , mientras que su hermano, de once, que se encontraba a su lado resultó herido leve en una pierna por la misma descarga y fue atendido en el hospital San Jorge de Huesca. El dueño de la atracción fue detenido como posible autor de un delito de homicidio por imprudencia y hoy pasará a disposición judicial.

El ayuntamiento que dirige Carlos Iglesias decidió suspender todos los actos de las fiestas patronales hasta mediodía de hoy, en que se celebrará una misa en memoria del niño. Era hijo de una serrablesa perteneciente a una conocida familia de la localidad, pero estaba afincado en Castellón, donde fue trasladado su cuerpo ayer tarde y donde se celebrará el funeral mañana lunes.

El accidente se produjo sobre las doce y media de la noche, cuando ambos niños esperaban fila para montarse en el saltamontes . El pequeño sufrió una descarga eléctrica por motivos aún no aclarados al acceder a la plataforma. Quedó gravemente herido y fue atendido por el 061, que trató de reanimarlo sin éxito y, posteriormente, trasladado al hospital de Jaca, donde ingresó cadáver --informó la Subdelegación del Gobierno en Huesca--, mientras que su hermano fue asistido de heridas leves en el San Jorge de Huesca.

RAPIDO Testigos del accidente relataron a Efe-Televisión que todo ocurrió muy deprisa, por lo que la gente que estaba alrededor de la atracción "casi no se enteró de lo que pasaba" y que, a pesar de los esfuerzos de los equipos de emergencia, no se pudo hacer nada por el niño, cuya muerte ha provocado una fuerte conmoción en la localidad serrablesa.

La madre de los dos menores, que según testigos en ese momento estaba con unas amigas en las cercanías, tuvo que recibir atención por el fuerte shock emocional que sufrió al enterarse de la noticia. Algunas fuentes aseguraron que ayer seguía ingresada en el San Jorge, víctima de una crisis de ansiedad.

A. R. H., de 40 años, natural de Autol (La Rioja) y propietario de la atracción en la que se produjo el accidente, fue detenido como presunto autor de un homicidio por imprudencia y prestará declaración hoy en el Juzgado de Instrucción de Jaca que tramita el caso.

El equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Jaca acordonó la zona para practicar una inspección ocular, mientras los peritos en electricidad examinaron la atracción para poder determinar el lugar exacto en el que se provocó la descarga.