Las noches ya no son sinónimo de alcohol, juerga descontrolada y resaca monumental. En Teruel se han encargado de que los jóvenes vean con otros ojos el fin de semana, ya que este verano han puesto en marcha el programa Ocio Nocturno , un conjunto de actividades que se han celebrado en cuatro barrios rurales de la capital: Caudé, Villaspesa, Villalba Baja y San Blas.

La participación ha sido, según el Concejal de Juventud, Luis Bo, "un rotundo éxito, ya que han participado en la propuesta alrededor de 200 jóvenes".

Las actividades realizadas se han caracterizado por la variedad de propuestas. Los tatuajes de Henna contaron mucho éxito, ya que se tuvo que repetir en el caso de Caudé, ya que en la primera sesión no pudieron tatuarse todos los participantes por falta de tiempo apunta el Concejal.

ACAMPADA DE VERANO

La otra actividad de carácter fue una acampada de fin de semana en la zona de Javalambre durante los días 31 de julio y 1 de agosto en la que se pudieron practicar distintos deportes de aventura, como senderismo, descenso de barrancos, escalada incluso rappel.

Los alcaldes pedáneos de los cuatro barrios rurales también se mostraron satisfechos con la iniciativa. "Ha sido una buena idea traer actividades a los barrios, porque se han cubierto horas en las que no se realizaba ninguna actividad", indica la alcaldesa de San Blas, Amparo Antón, donde se celebró una sesión de automodelismo y con dos coches teledirigidos que pudieron manejar todos los participantes. También se realizaron cursos de DjIs, de masaje y relajación, así como actividades deportivas como la modalidad de tiro con arco.

Los jóvenes, por otro lado, manifestaron que la idea había sido muy buena. Fran Rodríguez, de 15 años, afirmaba que "era mejor tener actividades que hacer que quedarse en casa viendo los programas de televisión".