Los detallistas del Mercado Central que ya tienen adjudicado el puesto en el futuro recinto de Lanuza, y que ahora están alojados temporalmente en la carpa provisional de la calle Salduba, trabajan con la previsión de abrir sus mostradores en el renovado edificio «durante la primera quincena de noviembre». El modificado de la obra, que ayer se publicaba ya de forma oficial en el perfil del contratante del ayuntamiento, confirma los 73 días adicionales que, tal y como adelantó este diario, durarán los trabajos en el emblemático edificio, y la posibilidad de volver para finales de septiembre o para las fiestas del Pilar ya la dan por descartada prácticamente.

Esta previsión, no obstante, no supone inquietud alguna para los detallistas, que están teniendo un alto nivel de colaboración con los responsables de la obra y el consistorio, a los que, de hecho, les ha solicitado crear nuevos espacios adicionales que no se incluían en el proyecto inicial pero que, al parecer, sí tendrían cabida en el nuevo edificio. Se trataría de habilitar un espacio centralizado de información para el usuario, otro que amplíe la reserva de metros cuadrados para un reparto de la compra a domicilio que «ahora realiza unos 25 servicios diarios de media» en colaboración con Atades, y que en el futuro mercado «podría duplicarse o cuadruplicarse».

Son siempre perspectivas optimistas las que manejan los detallistas que también han planteado la posibilidad de crear «un nuevo espacio de animación infantil y de dinamización» que sirva de aliciente para atraer a más visitantes. Se está estudiando.