Salud Pública ha detectado un caso confirmado de legionelosis en un interno de la cárcel de Zuera. El paciente, que tuvo que ser ingresado pero ya ha recibido el alta, se trata del tercer caso de legionela en este centro desde mayo del 2018, «por lo que se considera una agregación de casos de legionelosis vinculada con esta institución», según notificó el boletín de Salud Pública.

Aunque desde Sanidad no se precisó en qué centro había tenido lugar la incidencia, fuentes penintenciarias apuntaron a este diario que un interno había sido trasladado al hospital por legionela y que, además, en dicha cárcel de Zuera se había iniciado un «tratamiento en tuberías».

Tras la investigación epidemiológica, microbiológica y de las instalaciones llevada a cabo, «aún no se ha detectado la posible fuente de infección», añadieron desde Salud Pública. Por esto mismo, se mantendrá vigilancia activa en el centro hasta pasados 6 meses del inicio de síntomas del último caso. Además, se han indicado instrucciones de limpieza y desinfección.

Por otro lado, el boletín de Salud Pública también informó ayer de un caso de chikungunya importado de Filipinas. Se trata de un virus que es transmitido por los mismos mosquitos que portan el dengue y el zika.

En este sentido, fuentes del Departamento de Sanidad precisaron que el caso se detectó a través del sistema de información donde, a raíz de otro tipo de prueba sanitaria, se detectó que portaba el virus.