La aduana de Barajas activó todas las alarmas. Un paquete que gestionaba Correos procedente de los Países Bajos y con destino una vivienda de María de Huerva estaba bajo sospecha de contener en su interior sustancia estupefaciente. Esto derivó en una investigación que acabó en la detención de un vecino de esta localidad zaragozana al que le intervinieron 36 kilos de metanfetamina, tanto en roca como en pasta, conocida como 'cristal'. Se trata de una de las incautaciones más importantes de este tipo de droga en los últimos años en Aragón.

Las pesquisas llevadas a cabo por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de Zaragoza se inició tras comprobar que la sustancia que había llegado desde Holanda eran 1.023 gramos de Glicidato Metílico de PMK, un precursor químico que es empleado para la fabricación de éxtasis y que figura en la lista roja de sustancias sometidas a regulación fiscal internacional desde enero del 2021.

El Juzgado de Instrucción número 25 de Madrid autorizó el seguimiento del sospechoso, H. P. C., de 60 años, y la entrega vigilada del paquete, según pudo saber EL PERIÓDICO. A este hombre le constaban numerosos antecedentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil de delitos tan diversos como robos con violencia, robos con intimidación y contra la salud pública; no solo en Aragón, sino también en la Comunidad Valenciana y en Navarra.

Sin trabajo

Este hombre, que no tiene trabajo conocido, vivía en una finca en la que los agentes del instituto armado observaron, desde el aire, que tiene tres edificaciones. Una de ella sería empleada como residencia, pero los investigadores sospecharon que dentro de una de ellas se podría estar realizando una fabricación ilícita de estupefacientes y sustancias psicotrópicas. De hecho, observaron que en sus redes sociales se hace llamar Hipoquímica y sus dos apellidos. Un apodo que a los agentes les parece curioso puesto que lo relacionan con la sustancia sospechosa del paquete.

Pero los agentes también pudieron comprobar que H. P. C. tenía siempre la misma rutina: salir sobre las 10.00 horas de su casa de María de Huerva e ir a establecimientos de hostelería de La Almozara donde conversaba con varios clientes para luego regresar a casa.

Por todo ello, el EDOA acordó la entrada y registro en la finca de H. P. C. hallando escondidos en botes de pintura 17,375 kilos de metanfetamina enrocada, 17,865 kilos de metanfetamina en pasta y 928 gramos de anfetamina en pasta. Todo tendría un valor en el mercado ilegal de 891.178 euros.

Los investigadores de la Benemérita concluyen que «esta persona pudiera estar elaborando sustancia estupefaciente o psicotrópicas en el domicilio en el que residía o realizando labores de recepción y custodia de dichas sustancia. A ello se le conoce en el argot de los narcotraficantes como guarderías. Por todo, el hombre fue arrestado como supuesto autor de un delito de tráfico de drogas.