Agentes de Policía han detenido en Huesca a un hombre por un presunto delito de robo con intimidación unos pocos días después de salir en libertad condicional de la prisión de Zuera, donde cumplía una condena de 2 años por un atraco en un estanco de la capital altoaragonesa.

Según informa el Cuerpo Nacional de Policía, el sospechoso, de 50 años, había sido detenido a finales del pasado mes de julio como autor de un robo con violencia en un estanco ubicado en la avenida de la Paz de Huesca y condenado días después a prisión por estos hechos.

Los nuevos hechos imputados tuvieron lugar a primeras horas de la mañana del pasado martes en el portal de una vivienda de la avenida Pirineos, donde el presunto atracador asaltó a una mujer que volvía a su casa tras realizar una gestión en su entidad bancaria.

Al parecer, el detenido entró detrás de la víctima y esperó a que se abriera la puerta del ascensor para cogerla del cuello y quitarle el bolso al tiempo que le decía "si gritas te mataré, quédate ahí y no te muevas".

El sospechoso, de complexión fuerte, alto y de tez blanca, vestía un jersey rojo y disimulaba su rostro con unas gafas oscuras y una gorra con visera.

Los datos identificativos facilitados por la víctima, que fue atendida de lesiones leves, así como por un testigo que observó como se cambiaba de atuendo el sospechoso permitieron a los agentes policiales llevar a cabo minutos después la detención del presunto delincuente y recuperar los objetos sustraídos.

Los responsables de la investigación ya habían comenzado a revisar, a partir de la anterior detención del sospechoso por el robo en un estanco, otros dos atracos sin resolver cometidos en mayo del año 2009.

En ambos casos, como en el posterior asalto al estanco, el autor se había servido de un mono azul, de cascos protectores auditivos, y de gafas protectoras para dificultar su identificación por las víctimas.

En el primer atraco imputado, el 13 de mayo de 2009, el sospechoso entró en un comercio de la capital altoaragonesa después de llamar al timbre, extrajo un cuchillo de unos 30 centímetros de longitud y huyó con el botín tras amenazar a las dos personas que se encontraban en su interior.

Dos días después, el presunto atracador entró en una panadería de la capital altoaragonesa y, tras mostrar el cuchillo que portaba, espetó "dame todo el dinero, y no mires al exterior porque hay dos gitanos esperándome".

Los elementos utilizados en los tres asaltos, la descripción de las víctimas y el similar modo de actuar del atracador han llevado a los investigadores a responsabilizar al detenido de los dos robos con intimidación llevados a cabo hace cinco años.

El detenido, vecino de una pequeña población próxima a la capital altoaragonesa, compareció ayer ante el titular del juzgado de guardia de Huesca, que ordenó su ingreso en prisión.