Un hombre de 37 años y vecino de Zaragoza fue detenido ayer por agentes del Cuerpo Nacional de Policía tras golpear a su esposa en la cabeza y los brazos y amenazar de muerte con una katana tanto a ella como al hijo de la pareja, de 14 años. La agredida sufrió heridas de carácter leve.

Alberto V. C., que cuenta con antecedentes por malos tratos a su cónyuge, admitió en primera instancia que había pegado a la mujer, si bien se negó a prestar declaración posteriormente.

Según fuentes policiales, los hechos ocurrieron en torno a las seis y media de la tarde en un inmueble de la calle Adolfo Aznar de la capital aragonesa. La esposa, que padece una grave enfermedad, esperaba la llegada de su marido, ya que tenía que visitar al médico y prefería ir acompañada.

Al parecer, la discusión se produjo cuando Alberto V. C. se negó a acudir con su mujer al facultativo, lo que provocó la intervención del hijo del matrimonio, que trataba de defender a su madre.

El presunto agresor asestó entonces varios golpes a la mujer, principalmente en la cabeza y en los brazos. Las heridas provocadas no revistieron gravedad.

Pero los momentos de mayor tensión se vivieron cuando el presunto agresor amenazó de muerte a su esposa e hijo con una katana (espada oriental). "¡Os voy a degollar a los dos!", exclamó el detenido, quien también llamó "cabrón" e "hijo de puta" a su descendiente cuando éste intentó ayudar a la agredida, agregaron las fuentes consultadas.

Fue entonces cuando el menor se encerró en el cuarto de baño y alertó al Cuerpo Nacional de Policía desde su teléfono móvil, mientras su padre intentaba abrir la puerta. Momentos antes ya había roto el teléfono fijo de la casa y varios objetos.

Poco después, varios agentes se personaron en el inmueble y detuvieron al hombre de 37 años, que ya fue arrestado en una ocasión anterior tras una primera denuncia interpuesta por la víctima, quien aseguró que las agresiones físicas y psíquicas se han repetido varias veces.

La mujer, que ha solicitado orden de protección por "miedo" a su integridad física y a la de su hijo, fue trasladada al hospital Provincial de Zaragoza, donde los médicos le trataron las lesiones. Por su parte, el detenido será juzgado conforme a la Ley de Juicios Rápidos.