El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón investiga el apuñalamiento sufrido por un zaragozano de unos 35 años en plena calle Tarragona que estuvo a punto de costarle la vida. El autor de la agresión, identificado como J. C., de 25 años y de origen español, fue arrestado en las inmediaciones con el arma ensangrentada en la mano.
El ataque tuvo lugar sobre las 23.00 horas en esta calle del distrito zaragozano de Delicias. Por causas que por el momento están pendientes de dilucidar, el sospechoso habría atacado a la víctima por la espalda cuando este se encontraba entre los bares El Triángulo Tropical y el Café Bar Tarragona. No hubo testigos presenciales del acuchillamiento, pero sí hubo una serie de personas que vieron al herido tirado ene l suelo desangrándose, mientras otro joven trataba de huir corriendo del lugar. No obstante, estas personas pudieron darse cuenta de las características físicas del sospechoso y rápidamente llamaron a la sala del 091 del Cuerpo Nacional de Policía que activó a varias patrullas de la Brigada de Seguridad Ciudadana, así como a la uvi del 061 para que rápidamente se trasladaran al lugar. Unos para acordonar la zona y conseguir detener al sospechoso y otros para asistir a la víctima.
La rápida actuación policial permitió detener a los pocos minutos al sospechoso, quien llevaba aún el arma empleada. Según fuentes consultadas por este diario, las dimensiones de la misma no eran excesivamente grandes, por lo que se podía esconder fácilmente entre las ropas. No le había dado tiempo ni de limpiar el filo del cuchillo.
Mientras se llevaban a cabo estas labores, los sanitarios estabilizaron y trasladaron al hospital universitario Miguel Servet de la capital aragonesa a la víctima, quien tuvo que ser intervenido de urgencia de la herida inciso contusa que sufrió. Al cierre de la edición impresa de este diario, la víctima permanecía ingresado en la unidad de cuidados intensivos (uci).
Agentes pertenecientes al Grupo de Homicidios se trasladó al lugar de la agresión para tratar de recabar la mayor cantidad posible de información de los testigos de cara a poder tomar declaración hoy al detenido como supuesto autor de un delito de tentativa de homicidio.
El por qué lo hizo es, por el momento una incógnita para los investigadores. Dependerá de la declaración del arresto, pero también de la víctima que, hasta que no se recupere, los agentes no le tomarán testimonio de lo ocurrido. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes de la Brigada Provincial de Policía Científica que recogieron pruebas en la zona. Especialmente llamativo fue el reportaje fotográfico realizado sobre la pared de uno de los bares de la calle, puesto que estaba impregnada en sangre. Ahí se habría apoyado la víctima antes de desplomarse en el suelo mientras gritaba ayuda.
Este apuñalamiento sorprendió a los vecinos de la calle Tarragona, muy próxima a la plaza Roma, y que en los últimos años es una zona tranquila, después de que llegara a declararse zona saturada la calle Escosura y adyacentes por la gran cantidad de bares y especialmente locales de alterne. La actuación policial unida a la presión de los residentes hizo que este tipo de establecimientos bajaran la persiana.
