La Policía arrestó ayer a dos jóvenes de 25 y 26 años por la quema de sendos contenedores en el paseo Ruiseñores y la calle Carrera del Sábado. La colaboración ciudadana, como suele pasar en estos casos, fue fundamental para el arresto de los presuntos pirómanos en cuestión de minutos.

Según informó el Cuerpo Nacional de Policía, un vecino de la zona llamó al 091 y una patrulla que se encontraban en las inmediaciones localizó a los detenidos, que se correspondían con la descripción que dio el denunciante y llevaban un mechero encima. Les dieron el alto en la cercana calle La Luz. La intervención fue desarrollada por agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón.

Los jóvenes pasarán a disposición judicial por los presuntos daños intencionados por incendio, un delito que se castiga con penas de prisión. Recientemente, un joven fue condenado a un año, tras un acuerdo alcanzado por la Fiscalía. También debió abonar el coste de los contenedores, de 700 euros más los costes de reposición por parte de la concesionaria, FCC. En total, unos 815 euros por depósito.

La Policía Local de Zaragoza y el Cuerpo Nacional de Policía mantienen un operativo conjunto de vigilancia nocturna de los contenedores, para atajar este tipo de vandalismo, que el año pasado se redujo considerablemente en Zaragoza. Aún así, la colaboración ciudadana, como en el caso de ayer, resulta fundamental para localizar pronto a los presuntos autores y poder arrestarlos en las inmediaciones, a poder ser in fraganti.

Por ello, ambos cuerpos insisten en que quien observe a alguien en actitud sospechosa en las inmediaciones de un contenedor avise al 091 o al 092 para que la patrulla más cercana pueda localizar a los pirómanos. El análisis de la Policía Científica permite además en ocasiones atribuirles otras quemas por el empleo de la misma técnica o similares acelerantes para cebar el fuego, que suelen iniciar en los depósitos de papel.