La Dirección General de Interior de la DGA ha abierto un expediente sancionador contra los responsables de la planta química de Inquidesa en Monzón (Huesca) por un escape de cloro a la atmósfera, registrado el pasado 11 de febrero. El accidente generó una nube contaminante que provocó la alarma entre la población.
En un comunicado remitido a la agencia Efe , el consistorio montisonense aseguró que el expediente se deriva de una denuncia cursada desde el municipio contra la industria por no respetar el protocolo de activación de emergencias establecido legalmente por Protección Civil.
Desde el Ayuntamiento de Monzón se afirmó que la normativa vigente obliga a los responsables de las diversas empresas a informar de forma inmediata a Protección Civil de las incidencias o accidentes registrados con el fin de acelerar la posible activación de los planes de emergencia.
Según informaron fuentes municipales, el incumplimiento del protocolo de activación de la alerta constituye, según la Ley de Protección Civil, una falta considerada como "muy grave", que puede sancionarse con multas que oscilan entre los 150.000 y 300.000 euros.
El expediente aportado por el municipio incorpora los datos recopilados por el propio consistorio y los obtenidos en el centro de emergencias del 112 de Aragón, cuyos responsables admitieron que la alarma no fue activada por la empresa sino por un particular que informó de la presencia de una "nube sospechosa" en el polígono industrial de la Armentera, donde se ubica la planta de Inquidesa.
La resolución del expediente abierto contra la planta química oscense corresponde a la Consejería de Presidencia y Relaciones Institucionales si la sanción oscila entre 150.000 y 300.000 euros, y a la presidencia del Gobierno de Aragón si supera esta segunda cantidad.
Las fuentes referidas añadieron que en el trámite de instrucción del expediente sancionador, Inquidesa "puede reconocer voluntariamente su responsabilidad antes de la resolución del procedimiento o por contra presentar alegaciones a su contenido".
