La DGA baraja hasta cinco proyectos diferentes para construir un quinto cinturón que evite los atascos que en época de vacaciones se producen en la Ronda Norte de Zaragoza, donde el pasado lunes se registraron hasta 11 kilómetros de retención al término de la operación retorno de Semana Santa. La nueva vía deberá discurrir a suficiente distancia de la ciudad como para separar el tráfico local del nacional.

Las diferentes opciones, contenidas en la Revisión del Plan General de Carreteras , parten de la idea de que la Ronda Norte, por la que pasan 78.000 vehículos al día, se halla "al límite de su capacidad". Asimismo, la DGA considera que el cuarto cinturón, que podría estar acabado en el 2007, no terminará con los problemas de saturación que padece la carretera Madrid-Barcelona a su paso por la capital aragonesa.

CINTURONES INADECUADOS Las cinco opciones para el futuro quinto cinturón, a las que se suman otras tres para dar continuidad al eje Norte-Sur, tienen como finalidad "facilitar" las comunicaciones entre las dos principales ciudades españolas "sin incidir en el entorno de la ciudad de Zaragoza", al igual que ocurre con la autopista autonómica proyectada entre El Burgo y la margen izquierda del Ebro.

En este sentido, la Revisión del Plan General de Carreteras considera que los tres cinturones de circunvalación que ciñen el casco urbano zaragozano "no tendrán características adecuadas para dar continuidad a la red de interés general del Estado ni para servir adecuadamente el tránsito de mercancías peligrosas".

Sin embargo, los expertos del Departamento de Obras Públicas de la DGA reconocen que el cuarto cinturón deberá "simultanear, durante muchos años", la función de enlace de las carreteras de ámbito nacional con la de lugar de paso obligado del tráfico local y metropolitano.

Por otro lado, el informe técnico de la Administración sostiene que, en su tramo norte, todavía no construido, el cuarto cinturón "estará algo más próximo a las edificaciones residenciales de lo que se considerará óptimo por razones de seguridad en los próximos años".

Al mismo tiempo, los trazados previstos para el eje Madrid-Barcelona y el Norte-Sur a su paso por Zaragoza buscarán comunicar diferentes itinerarios causando el menor impacto posible en Zaragoza, como ocurre en los recorridos Huesca-Teruel y Sagunto-Teruel-Cariñena-Gallur. Además, las nuevas infraestructuras tratarán de asegurar la operatividad en Aragón de la futura autopista Madrid-Pamplona por Soria y Tarazona y la progresiva conversión de la red de carreteras aragonesas en un sistema interconectado.

Por su parte, Antonio Gaspar, teniente de alcalde de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza, atribuyó ayer los atascos en la Ronda Norte a la "insuficiencia" del cuarto cinturón y abogó por la construcción de una nueva circunvalación "ya contemplada en el Plan de Ordenación Urbana".