Un total de 48 municipios aragoneses se beneficiaron el año pasado de las dos convocatorias de ayudas dirigidas a entidades locales para impulsar actuaciones encaminadas a la creación o mejora de infraestructuras de depuración de aguas residuales, que han contado con una dotación de 9,4 millones de euros. Para este 2019 está prevista una primera convocatoria de subvenciones específica destinada a los municipios del Pirineo por valor de 6,3 millones.

«El reto de abordar lo más pequeño es técnica y económicamente más difícil» destacó el consejero de Desarrollo Rural, Joaquín Olona, al inicio de la jornada técnica organizada por el Instituto Aragonés del Agua (IAA). El consejero recordó que en Aragón se está tratando el 89% de la carga contaminante de las aguas residuales y el 11% restante se corresponde con estos pequeños núcleos distribuidos en todo el territorio.

En términos relativos resulta más costosa la depuración en pequeños municipios, ya que se produce un mayor coste de inversión y explotación por unidad de carga contaminante o habitante equivalente. Las subvenciones del IAA sirven para que los ayuntamientos tomen la iniciativa, eligiendo el tipo de tratamiento que consideran más adecuado.

ÚLTIMA ZONA

Por otra parte, el IAA está ejecutando de forma directa las depuradoras pendientes de más de 1.000 habitantes equivalentes de la última zona del Plan Especial de Depuración, la denominada Zona 10 en las provincias de Teruel y Zaragoza.

Por ejemplo, la planta de gestión de aguas residuales de Castelserás entró en funcionamiento el pasado verano y las otras dos de mayor tamaño en Calaceite y Maella se encuentran en ejecución con la previsión de que entren en funcionamiento en primavera. Las depuradoras de Castellote, Mas de las Matas y Mazaleón se licitaron y adjudicaron en el 2018 y está previsto el inicio de las obras este mismo mes de febrero. Asimismo, están redactados los proyectos de Nonaspe (en información pública), Valdealgorfa, Aguaviva, Cantavieja y La Iglesuela del Cid, que se licitarán a lo largo de este año.

El Gobierno de Aragón asegura que con la ejecución de las estaciones de aguas residuales de Calaceite y Maella se completará el rango de actuaciones de más de 2.000 habitantes equivalentes, que quedaban pendientes en las provincias de Zaragoza y Teruel.

JORNADA CRÍTICA

La jornada celebrada en el marco del vigésimo cuarto Salón del Agua y del Riego fue contestada de forma tajante por la Red de Agua Pública de Aragón (Rapa) al considerar que obedece a los intereses de las grandes constructoras. Por ese motivo organizaron una charla alternativa en el centro Joaquín Roncal de Zaragoza con el objetivo de evidenciar que existen otras formas de gestión.

El alcalde de Fabara, Francisco Domenech, defendió que la depuradora que pusieron en marcha en su municipio, basada en un sistema ecológico, lleva diez años funcionando «sin subvenciones» y criticó «el acoso sistemático» que han recibido desde la DGA y el IAA. «La eficacia está contrastada con datos sistemáticos que han sido publicados y validados a nivel internacional en prestigiosas revistas científicas», explicó el catedrático de la Politécnica de Madrid, Jesús Fernández.

Los miembros de la Rapa aseguran que aplicando modelos ecológicos se hubiera ahorrado «mucho dinero».