Tanto el Gobierno de Aragón como el Ayuntamiento de Zaragoza inician el 2019 con los presupuestos prorrogados. Javier Lambán todavía no ha presentado el borrador del proyecto de presupuestos y el alcalde Pedro Santisteve, que sí lo ha hecho, tiene pocas opciones de sacarlo adelante porque no ha iniciado las negociaciones.

Esto significa que no se podrán realizar ni proyectos ni nuevas inversiones, solo las que ya se contemplaban en las cuentas del 2018 y que se arrastrarán durante este curso. Quedan cinco meses para las próximas elecciones autonómicas y municipales, por lo que, en caso de aprobarse, tendría que ser en marzo, como tarde, y teniendo en cuenta que las conversaciones se prolongan durante varias semanas, parece complicado que ambas instituciones lleguen a las elecciones con unos presupuestos aprobado. Si esto sucede, el próximo Gobierno podría tenerlos en vigor en otoño. Precisamente, los grupos de la oposición en la DGA criticaron el discurso de Lambán por carecer de unas cuentas para poder ejecutar todas las promesas que anunció en su mensaje de final de año.

En el ayuntamiento zaragozano hace varias semanas que Santisteve envió a los grupos municipales el borrador de presupuestos, aunque no ha iniciado la ronda de negociaciones, ni siquiera con el PSOE y CHA, con quienes prevé volver a pactar las cuentas. Sí que se ha reunido con los portavoces de las formaciones para tratar de convencerles de que voten a favor de su plan de vivienda, para el que el consistorio necesita un crédito de 50 millones.